Cueva de Las Polvorosas
Se trata de un gran abrigo en la pared derecha del barranco del rio Formiga. Se accede a ella a partir de una curva a dos kilómetros de Panzano, por la carretera de Aguas a Bierge. Está señalizada como aparcamiento para los barranquistas que hacen la bajada del rio.
Tradicionalmente esta cueva era usada como corral de ganado, especialmente de rebaños de ovejas. El espacio aprovecha como cubierta la ennegrecida pared del macizo de conglomerado del barranco. La puerta de entrada por el muro sur y por el oeste, el vertiginoso acantilado al río junto con algún gran bloque de piedra conforman el cerramiento. La cueva, dispone también, de una pequeña caseta de mampostería irregular. Hoy bastante maltrecha, servía para que el pastor pudiera guarecerse de las inclemencias del tiempo.
El Barranco del Formiga es uno de los barrancos más populares de la Sierra de Guara. Se trata de un barranco corto, fácil, que congrega multitud de barranquistas durante la época estival y que invita al baño en algunas de las pozas accesibles a pie.
El recorrido hasta la cueva permite disfrutar de los atractivos del entorno por el que discurre. Desde la sorpresa de la inmensa cueva de las polvorosas, los característicos conglomerados calizos modelados por la erosión kárstica o el avistamiento de aves carroñeras, que habitan las oquedades de estos paredones rocosos como los buitres, los alimoches e incluso el majestuoso quebrantahuesos.
Pozas en el barranco del Formiga.