Se trata de realizar una ruta circular por algunas de las principales cimas de la Sierra de Guara. Saliendo desde la Tejería, subimos al Pico de Mondinera, bajamos al Collado de Lizana, pasamos por el Fraxinito y sus crestas, subimos al Corcurezo, y bajamos al collado de Petrañales. Desde allí iniciamos la ascensión al Tozal de Guara pasando por el Llano de Hongos. Desde el Tozal descendemos siguiendo la senda hasta el collado de Ballemona, y luego bajamos por la senda de Santa Cília. Enlazamos con la pìsta que nos lleva a la ermita de Arraro y desde allí vamos al encuentro de la pista que viene de las Casas de la Fueva, dirección Paridera de Upiaso. Finalmente regresamos a la Tejería, pasando muy cerca de la Cola del Calcón.
Salimos desde el parquing de la Tejería. La primera cima que abordamos es la de Mondinero, siguiendo las indicaciones explicadas con todo detalle en nuestra web, Ruta P10 Guara Central. Pico Mondinero. Primero subimos a la cota 952 y seguimos por la pista hasta el Llano de la Carrasca, allí tomamos el sendero que nos lleva al Chiflo, que bordeamos por la izquierda, e iniciamos una ascenso mucho más pronunciado. Finalmente, pasando entre bojes bajos y erizones, llegamos a la cima del Pico Mondidero (1469 m).
Desde el Pico Mondinero tenemos una vista priveligiada del Fragineto, al que nos dirigimos. Seguimos el sendero que baja al Collado de Lizana, el cual es batante empinado (170 m de desnivel en apenas 400m), y la abundante vegetación dificulta un poco el descenso. Continuamos por el sendero que atraviesa el collado y rápidamente empieza subir. En algún momento se debe trepar y seguir los mojones y las señales pintadas en las rocas. De esta forma se llega a las crestas, desde las podemos contemplar una vistas impresionantes del embalse de Vadiello. Seguimos subiendo por ellas hasta llegar al pico Fraxineto (1738 m).
Una vez en la cima (1748 m) podemos contemplar un paisaje extraordinario, y ver fácilmente la ruta que seguiremos a continuación. Seguimos por la cresta de la Ronera, y pasamos por dos pequeñas cimas secundarias (1705 m y 1643 m), antes de llegar al Pico Corcurezo. Desde este último divisamos a nuestros pies la Villa de Nocito y, a la derecha, el santuario de Sant Urbez. Retrocedemos unos pocos metros para tomar el desvío hacia Petreñales, indicado por mojones.
En el collado de Petreñales encontramos un poste con cuatro flechas direccionales. Seguimos la nos indica Tozal de Guara y empezamos a bajar ligeramente por un sendero, entre bojes, pinos y chinebros, pasamos por Fuente del Chinebros hasta llegar al Llano de los Hongos. Desde allí la senda asciende, primero ligeramente luego con mayor inclinación, hacia la cresta del monte Guara y nos llevará hasta el famoso monolito pétreo con cruz con que se identifical el Tozal.
En el Tozal (2078 m) disfrutamos de un merecido descanso mientras contemplamos el magnífico panorama: La cordillera de los Pirineos, por el norte; las otras grandes cimas de la sierra, Cubillas y Cabezo, por el este; El Somontano de la Hoya de Huesca al sur y el Fragineto por el Oeste. Seguimos nuestra circular tomando el sendero dirección collado de Ballemona, psando primero por una punta de 1923 m y después por otra de 1957 m. Ya a punto de llegar al collado de Ballemona, encontramos el monumental Pozo de Nieve con un plafón explicativo de su importancia histórica. Atravesamos el llano hasta encontrar Camino de Used a Santa Cilia.
Pasamos el llano hasta encontrar un poste con flecha dirección Santa Cilia y empezamos a bajar por este sendero, primero rodeado de erizones, luego con algunos pinos y matorrales de alta montaña. El descenso de unos 4 km es bastante intenso, con algunos tramos de suelo rocoso sin compactar. Pasamos por un pequeño claro con las tres simpáticas balsetas de Fondarrés y seguimos descendiendo hasta encontrar la pista señalizada hacia la ermita de Arraro
Seguimos la indicación dirección oeste, por la denominada calle única de Santa Cilia, que nos llevará, entre pinos y carrascas, hasta el siguiente desvío a Arraro, también señalizado con poste y flecha. Tomamos el sendero que bordea el barranco de Yara, contornea el monte hasta escontrar con la indicación de subida final a la ermita de Arraro.
Las ruínas de la ermita de Nuestra Señora de Arraro es lo que queda de un antigua parroquia medieval con fortificación en el promontorio norte que la protege. Tomamos un pequeño respiro antes de realizar la última fase de esta larga circular. Descendemos 300 m por el mismo camino de subida a la ermita y cuando volvemos a encontrar el sendero que contornea el monte y lo seguimos a la derecha hasta encontrar la pista que viene de las Casas de Fueva. Por esta pista descendemos casi 5 km en bosques de pinos y carrascas, pasando por la planta reguladora del río Formiga, la Paridera de Upiaso y el Trasvase del Formiga al Calcón.
La primera dificultad está en el largo recorrido de la ruta circular (unos 31 km) y que siempre se camina por las cimas y crestas de la Sierra de Guara. Hay que estar atento a los pronósticos metereológicos, y en consecuencia, hay que llevar un buen equipo de montaña y material de avituallamiento básico.
Hay algunos tramos que entrañan una cierta dificultad, sobre todo para los excursionistas poco habituados a senderos de alta montaña (p.ej. las Crestas del Fraxinito).